Si bien en la actualidad, la mayoría de los automóviles cuentan con asistencia en carretera, siempre es mejor estar preparado para emergencias. Una de ellas es cambiar un neumático que se ha pinchado durante un viaje en carretera. Muchas personas subestiman la importancia de saber cambiar un neumático y confían en la ayuda externa. Pero, ¿qué sucede si te encuentras en un lugar lejano y sin señal de celular? La habilidad para cambiar un neumático es definitivamente una habilidad importante en la conducción, por lo que aquí te enseñamos cómo hacerlo.
1. Asegúrate de estar en un lugar seguro
Cuando la llanta se poncha mientras estas conduciendo, es importante mantener la calma y buscar un lugar seguro. Lo mejor sería salir de la vía o carretera, asegurándose de poner las señales de peligro para que los demás conductores puedan ver que hay un automóvil detenido en ese lugar.
2. Reúne todo lo que necesitas
Antes de comenzar a cambiar la llanta, asegúrate de que tienes las herramientas necesarias, como el gato del automóvil, la llave de rueda y la llanta de repuesto. Si tu automóvil carece de herramientas, te recomendamos que revises la caja de herramientas en la parte trasera.
3. Coloca el gato en posición segura
Una vez que tengas las herramientas, asegúrate de que el vehículo esté en una superficie plana y que el freno de mano esté aplicado. Luego, debes colocar el gato justo debajo del borde de la carrocería en el lugar donde se encuentra la llanta que necesitas cambiar.
4. Levanta el vehículo
Usando la llave de rueda, gira las tuercas de la llanta en sentido contrario a las manecillas del reloj para aflojarlas antes de usar el gato. Luego, empieza a levantar el automóvil con el gato en la elevación segura. Procura no colocar ninguna parte del cuerpo debajo del automóvil para su seguridad.
5. Quita la llanta pinchada
Una vez que hayas levantado el automóvil, quita las tuercas sueltas a mano y luego gira la llanta para sacarla de las clavijas. Una vez que la tengas en tus manos, métela en el maletero o en un lugar seguro.
6. Instala la llanta de repuesto
Con la llanta de repuesto en tus manos, verifica que la llanta esté inflada con la cantidad correcta de aire. Luego, alinea los orificios de los tornillos con los de la llanta del automóvil y levántala en los clavos del vehículo. Atornilla las tuercas a mano antes de usar la llave de rueda para ajustarlas.
7. Baja el automóvil
Una vez que hayas asegurado la llanta firmemente, baja el vehículo sobre el suelo. Desenrosca el gato y luego usa la llave de ruedas para apretar las tuercas.
En resumen, el cambio de una llanta pinchada puede parecer complicado al principio, pero con la práctica se convierte en algo fácil y automático. Asegúrate de tomar las precauciones necesarias y de que tienes las herramientas necesarias. Recuerda que una llanta de repuesto siempre es útil en situaciones de emergencia, por lo que siempre debes revisar que tenga la presión adecuada. Con estos consejos, estarás listo para manejar cualquier emergencia en la carretera sin problemas.